Lectoras/res

lunes, 8 de noviembre de 2010

Sie glauben in einer glücklichen Ende ~Capítulo #6~

Me estaba volviendo loca, no podía estar más aquí, no comía, no dormía, estaba ida. Quería volver a casa, con mi familia, pero cada vez que pensaba en eso, mis lágrimas hundían mi cara. Ah Bill ya no lo volví a ver, pero no me importaba casi. Hasta que…

Entro un hombre, me saco del cuarto, llevándome atrás, era un patio enorme y frondoso, había más mujeres ahí, se me hizo demasiado raro, pero todas eran mayores, parecían de unos 18 años, una sé acerco a mí.

     - Hola – dijo casi en susurro

     - Hola – dije de igual manera

    - Soy Daniela – sonrió – y ¿tú? – se sentó a la par mía

    - (Tú nombre) – baje la mirada

    - Eres muy chica para estar aquí ¿verdad? – me miro con sorpresa

    - Sí – conteste brevemente

    - No sabes ¿quién te trajo? – miro de reojo hacía la gran puerta

    - Bill Kaulitz – mis ojos comenzaron a cristalizarse

    - ¿Bill? – pregunto con sorpresa

    - Sí – la volteé a ver - ¿Por qué?

    - Pues… Se me hace raro que el… Te haya traído aquí – frunció el ceño

   - ¿Por qué lo dices? – la mire extrañada

   - El… - se acerco a mí – No es como los otros – giro la cabeza – Sus padres murieron, solo quedo él y su hermano… Su hermano es el “jefe” de esto – bajo la mirada – Bill… Es muy duce… Tierno… - suspiro – Es gran chico

   - Claro que no – grite

  - Baja la voz – me jalo del brazo – Claro que lo es. Por alguna razón te trajo aquí

Mi mirada se fue con un tipo con una pistola en la mano, cuando veo que Bill entra al jardín, el al verme sonríe, pero no le tomo importancia, se acerca a mí, tomándome del brazo, Daniela me ve con miedo, susurrando algo.
Bill me cargo como un costal, llevándome a un cuarto, al entrar me avienta al cuarto, yo espere lo peor de eso, se sube encima de mí.

   - Tranquila – acarició mi mejilla

Me dio un beso en los labios, quitándose de encima, su ropa cayó al piso, hasta que el quedo en ropa interior, yo me moría de los nervios, tenía miedo de lo que me haría.

  - Tranquila – rió – No te hare nada – me guiño un ojo

Se acerco a mí, hasta quedar a un lado, cerró sus ojos y me abrazo. Quedando en un profundo sueño.

~*~

4 comentarios: